¡DURÍSIMO MOMENTO LA ESCENA! 🥲
La reconocida actriz Ludwika Paleta se enfrentó al que considera uno de los momentos más desafiantes de toda su trayectoria artística. En la película “Después”, dirigida por Sofía Gómez Córdova, interpreta a Carmen, una madre que atraviesa el dolor más profundo tras la pérdida de su hijo. Lo particular de esta historia es que comparte escena con su hijo en la vida real, el actor Nicolás Haza, lo que convirtió el rodaje en una experiencia tan intensa como significativa.
El filme, cuyo estreno está previsto para el 13 de noviembre de 2025, promete mostrar una mirada íntima y conmovedora sobre el amor materno y el proceso de reconstrucción emocional después de una tragedia.
Durante una conferencia de prensa, Ludwika reveló que la grabación de las escenas más duras fue un reto emocional extremo. Aunque comprendía que se trataba de una ficción, el simple hecho de representar la pérdida de un hijo le generó un temor profundo. “Tenía mucho miedo de llegar a esas escenas que yo sabía serían de una sola toma, porque no quería sentir eso varias veces. Ponerme en esa situación fue fácil, tengo ese sentimiento a flor de piel; el simple hecho de imaginarme algo así me pone ahí”, confesó visiblemente conmovida.
La actriz explicó que optó por no ensayar las secuencias más dramáticas. Quería preservar la autenticidad del momento y evitar el desgaste emocional que implicaba revivir esas emociones una y otra vez. “Preferí no ensayar, solo entender a mi personaje y descubrir qué pasaba en escena, porque sabía que sería muy doloroso”, comentó.
Para Ludwika, su propia experiencia como madre fue clave para comprender el dolor de Carmen. “Afortunadamente solo es en una película y espero que nunca me pase algo así con ninguno de mis hijos. Como dice Sofía, no alcanzan las palabras para describir un dolor así. Lo peor es que uno sigue viviendo; hay un ‘después’, y uno decide cómo afrontarlo”, expresó con sinceridad.
Su hijo, Nicolás Haza, también habló sobre lo que significó compartir pantalla con su madre. Reconoció que trabajar juntos fue un aprendizaje profundo, tanto a nivel personal como profesional. “Ver a mi mamá llorar y que sí sea mi mamá fue un estímulo, te mete mucho en la historia. Pero era importante separar la relación real de la de los personajes. No queríamos caer en la comodidad de ser madre e hijo, sino construir desde otro lugar”, explicó el joven actor, quien destacó el compromiso artístico que ambos mantuvieron durante la filmación.
Ludwika, por su parte, reflexionó sobre la manera en que la película aborda el tema del duelo desde una perspectiva humana y emocional. “La tragedia de que alguien tan joven pierda la vida es también perder la oportunidad de seguir conociéndolo. Eso la hace aún más dolorosa”, comentó.
Pese a la dureza del tema, la actriz no ocultó su alegría por haber compartido este proyecto con su hijo. “Me encantó trabajar con él. Si hay papás que pueden hacerlo, háganlo. En esta etapa en la que los hijos ya no quieren estar tanto contigo, fue una oportunidad de conocernos un poco más”, dijo con una sonrisa, dejando ver el orgullo y la conexión familiar que los une.
Además, Paleta destacó la madurez y profesionalismo de Nicolás durante el rodaje. “Entiendo que mi hijo quiera independizarse, tener su propio nombre y carrera, y eso me parece perfecto. Eso te hace agradecer y valorar las cosas”, añadió.
“Después” se perfila como una de las películas mexicanas más emotivas del año. Con una historia que explora el amor, el duelo y la esperanza, la cinta promete conectar con el público a través de una narrativa sensible y una actuación cargada de verdad.
Por primera vez, Ludwika Paleta y Nicolás Haza comparten la gran pantalla, interpretando a madre e hijo tanto dentro como fuera de la ficción, en un relato que invita a reflexionar sobre la fuerza del amor y la capacidad humana para seguir adelante incluso después de las pérdidas más difíciles.
