La fibromialgia es una enfermedad crónica que afecta cada vez a mas personas en todo el mundo. Esta tiene como alguna de sus características, presentar fuertes dolores en los músculos y huesos y alterar nuestro sistema nervioso, pudiendo originarse a raíz de fuertes disgustos o problemas emocionales. Su diagnostico puede estar relacionado con: factores neuronales u hormonales, puede llegar a estar presente en nuestra genética o algún problema inmunológico de nuestro cuerpo.
4% de la población mundial se ve afectada por esta enfermedad, del cual las mujeres en edad reproductiva ocupa casi el 90%, siendo un 60% relacionado a cuadros de depresión y el otro 40% a problemas de ansiedad.
Si bien todavía se desconoce, dentro de las causas, que produce exactamente este tipo de enfermedad, se pueden tener en cuenta varios factores. Dentro de los eventos o agentes que pueden desencadenarla podemos encontrar: Accidente automovilístico, infección viral o bacteriana o puede aparecer luego de una enfermedad que hayamos transitado.
Su forma de presentarse clínicamente se da por la revelación de una serie de síntomas y señales como los que te vamos a detallar en la siguiente lista:
Síntomas:
- Dolor en nuestros músculos, articulaciones y tendones.
- Fatiga extrema.
- Trastorno del sueño.
- Síndrome de las piernas inquietas a la hora de dormir.
A grandes rasgos, podríamos decir que la fibromialgia es una anormalidad en como percibimos el dolor, de forma que se sienten como muy dolorosos estímulos que generalmente son casi imperceptibles. Sumándose al dolor en nuestras articulaciones, ligamentos y tendones, en esta enfermedad puede manifestarse rigidez general en nuestros músculos cuando nos queremos levantar por las mañanas, la cual va acompañada por una sensación de inflamación en nuestras manos y pies. Otro síntoma puede ser la sensación de hormigueo en las distintas partes de nuestro cuerpo pero sobre todo en nuestras manos. Los que padecen la fibromialgia, a su vez, pueden presentar síntomas determinados por la depresión, los trastornos del sueño, el cansancio o la ansiedad.
Para diagnosticar esta afección, el medico realiza una exploración física de todo nuestro cuerpo, haciendo presión en 18 puntos concretos de nuestro cuerpo, los cuales son llamados «puntos gatillo». Una vez se llega a un diagnostico concreto, el profesional nos indicara el tratamiento que deberemos seguir, un tratamiento multifuncional, que se caracteriza por ocuparse de los síntomas mediante la utilización analgésicos, antidepresivos, terapia tanto psicológica como física y una alimentación acorde a la enfermedad que estamos transitando. Siempre hay que tener presente que no hay una cura total y definitiva para la fibromialgia. Un medicamento utilizado en el tratamiento de la enfermedad es la pregabalina, arrancando con dosis de 25mg en adelante, dependiendo las indicaciones medicas. El tratamiento tiene como objetivo reducir el dolor y tratar los síntomas que lo acompañan. Para las alteraciones del sueño se va a prescribir un tratamiento especifico donde además del farmacológico, habrá una serie de reglas higiénicas a seguir para poder conciliar el sueño de una mejor manera. Reglas entre las cuales se puede mencionar:
- El ambiente donde descansemos tiene que ser oscuro y sin ruidos.
- Utilizar una almohada no muy alta.
- Evitar ingerir productos psicoactivos tales como el café o el alcohol en las 2 horas previas a la hora de acostarse.
- No exponerse a temperaturas extremas.
La enfermedad, a pesar de ser de un carácter benigno porque no deja en nuestro cuerpo secuelas físicas ni altera la supervivencia de nuestra persona, produce una modificación en la calidad de vida que hace que esta cambie de manera radical, hasta el punto de que ser limitante en algunos casos particulares.